Mi madre ya está con el Señor, pero es bueno recordar sus hechos de amor. El mismo Señor Jesús valorizó los hechos de amor de algunas mujeres en Su Palabra y quiso que hubiera memoria de ellas.
En estos momentos recuerdo a María, que ungió los pies del Señor con su perfume costoso, a la viuda, que entregó aquellas dos monedas en la ofrenda y era todo sustento, y la mujer sirofenicia, que se acercó a Jesús pidiendo ayuda y el Señor señaló que no había hallado fe en todo Israel como la de ella.
Podríamos señalar más ejemplos de mujeres piadosas. Sabemos que todo ejemplo de piedad redunda en nuestro beneficio y como principal consecuencia la gloria de Dios.
Por ello recuerdo a mi madre, una mujer piadosa que amaba a Dios y a su prójimo como a ella misma. Y con ella el homenaje a todas las mamás en estas rimas simples pero sentidas que escribí ya hace varios años.
A MAMÁ
En el día de la madre, si es que para ella “hay un día”
Quiero ofrecer un poquito de cariño en estas rimas
Y en mi madre encierro a todas, porque creo que ella es
Por sus virtudes de siempre, muy buena madre y mujer
Dios le concedió la gracia de que nietos y bisnietos viera
Y no hay nadie en nuestra casa que no respete a “su abuela”
Ella es prolija en costura, en tejidos o en cocina
Y está dispuesta a ayudarnos como la mejor amiga
¡Dios te bendiga mamita! Te dé el premio a tu labor
Sacrificando tu vida, dando lo mejor de vos.
Raquel 29/9/98

Acerca del Autor

Raquel Vázquez
Arquitecta |  + posts