“Los niños necesitan el evangelio, todo el evangelio, el evangelio puro; deben conocerlo, y si el Espíritu de Dios les enseña, tienen la misma capacidad de recibirlo que las personas mayores.

Enseñen a los pequeños que Jesús murió, el Justo por los injustos, al fin de llevarlos a Dios.”

(C. Spurgeon)

 

El pasado Domingo, mientras el mundo se preparaba para celebrar la oscuridad y la muerte, en nuestra iglesia tuvimos el Festival de Colores, una fiesta llena de vida, colores y juegos, pero lo más importante, donde el evangelio fue presentado a casi 60 niños, muchos acompañados por sus familiares.

A través del color Amarillo, los niños aprendieron del amor de Dios y su Santidad. Con el color Negro, descubrieron que todos somos pecadores y la consecuencia del pecado. El Rojo dio lugar para hablar del Sacrificio de nuestro Señor Jesucristo y su resurrección. ¡El Blanco los invitó a recibir a Cristo como su Salvador, y el verde a descubrir cómo vivir una vida que agrade a Dios!

Solo tenemos palabras de agradecimiento, primeramente al Señor, por darnos la libertad de predicar Su Palabra a los niños y ser luminares en un mundo oscuro. En segundo lugar a todas las personas, de diferentes edades, que dedicaron de su tiempo y colaboración para armar todo.

¡Sin dudas fue una verdadera fiesta!

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Eugenia Medaglia
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