La verdad es que aunque a las madres cristianas nos ensalcen todos los años con estos hermosos versos, nosotras sabemos que estamos a millas de distancia de tan encomiables honores. Por eso hoy los repito pero para que nos pongamos estas metas y tratemos con la ayuda del Espíritu Santo alcanzar las virtudes de esta maravillosa mujer de Dios, LA MUJER VIRTUOSA de Proverbios 31:10-31.
Ella es digna de confianza y honradez:
Aporta cosas buenas a su familia y relaciones
Es diligente y laboriosa
Administra todas las tareas domésticas con destreza
Muestra buen juicio en los negocios
Cada día trabaja sin cansancio
Sus manos siempre están creando cosas buenas y necesarias
Tiene conciencia social, le tiende la mano al pobre
Viste bien a toda su familia
Se gana el respeto de todos
Instruye a sus hijos en el temor a Jehová.
Bueno queridas madres, ya no las canso con tantas exigencias, sé que ustedes son modernas, que la ayuda manual ahora es pagable, que los tiempos han cambiado y la modernización suple más de lo que necesitamos, pero lo que no cambia es la voz de Dios y lo que jamás deberá ser suplantado es su palabra. Así que nos toca a las que amamos y tememos a Dios, sujetarnos a ella y al modelo que Dios ha dibujado para parecernos cada día más a él. ¡Aún queda mucho por hacer!
Por todo esto, les doy mi saludo por nuestro día de la madre, pero al mismo tiempo, como sierva de Dios, las insto a seguir trabajando incansablemente para alcanzar la corona imperecedera que Dios tiene preparada para todos aquellos que buscan con humildad hacer su voluntad…
¡Feliz día mis amadas madres de oración con todo mi amor!