Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Hebreos 4.12
La PALABRA VIVA
El médico usa un estetoscopio para escuchar los latidos del corazón, “la vida” en una persona.
En la Palabra de Dios hay VIDA, porque es viva, y trasmite esa vitalidad.
– Esa palabra VIVA es la misma que se usó en Génesis en la creación, cuando Dios sopló en el hombre aliento de vida, le transmitió su vida.
Es VIVA porque en ella encontramos las buenas noticias que generan vida eterna, salvación para nuestras, y vida abundante para aquellos que la obedecen.
Es VIVA porque permanece para siempre. No muere, el cielo y la tierra pasarán, pero no así su palabra. Cuántos escritos y filosofías han existido en la historia sin embargo hoy quedó en el olvido, sepultadas, muertas. La palabra de Dios que ha tenido tantos enemigos y está más vigente que nunca y sigue obrando en las vidas de millones de personas en todo el planeta a lo largo de todos los tiempos.
Voltaire fue un reconocido filósofo francés, y una vez dijo: “En 100 años el cristianismo y la biblia desaparecerán”. Sin embargo al morir él, su filosofía quedó en el olvido y algo aún más sorprendente pasó. Sus bienes fueron vendidos y su casa con una imprenta fue comprada por sociedades bíblicas. Desde su propia casa se siguieron haciendo ejemplares de ese maravilloso libro que el tanto rechazó.
¡Todo pasa, todo desaparece, menos la Palabra de Dios porque es VIVA!
La PALABRA EFICAZ
¿Recuerdas alguna vez haber tenido alguna dolencia, y probar varios medicamentos y ninguno te hace efecto, hasta dar con uno que justo era lo que necesitabas? Te curas y se soluciona tu problema!. Eso es EFICAZ!
Así es la palabra de Dios, EFICAZ, justo lo que necesitamos.
La palabra EFICAZ en el original es energía. Su palabra está cargada de energía y poder.
Es EFICAZ para cuando hay soledad, para cuando hay miedos, dudas, preocupaciones, angustias, enfermedades, indecisiones, pecados. Es EFICAZ para todas y cada una de las situaciones que se te ocurran.
Y siempre cumple los propósitos para los cuales Dios la envió.
Isaías 55.11: “así será mi palabra que sale de mi boca, no volverá a mí vacía sin haber realizado lo que deseo, y logrado el propósito para el cual la envié.”
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