«Dios es juez justo, y un Dios que se indigna cada día contra el impío» (Salmos 7:11).
«Porque no nos ha destinado Dios para ira, sino para obtener salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, que murió por nosotros, para que ya sea que estemos despiertos o dormidos, vivamos junto con Él» (1 Tesalonicenses 5:9-10).
REFLEXIONA: El discurso de muchos cristianos se limita solo al tema del amor de Dios. La mayoría mira a Dios como un abuelo complaciente que tolera todo tipo de mal comportamiento. Hacen lo que quieren, viven dándole la espalda, y luego le llaman «Papá Dios» o dicen: «Dios me ama tanto que no me va a castigar». Ese dios es solo imaginación de los hombres que no reconocen que están en falta.
La Escritura no solo nos muestra el amor de Dios, también revela que Dios está airado contra el pecador todos los días. Hay un problema serio entre Dios y el hombre, y ese problema es el pecado.
El pecado ha marchitado la relación entre ellos y ha creado un profundo abismo que los divide. No existe ninguna «buena obra» o penitencia que el hombre pueda hacer para quitar la ira que pesa sobre sus hombros. Únicamente un sacrificio perfecto podía satisfacer la ira de Dios, y ese sacrificio es Jesús.
Solamente Él pudo llenar todos los requisitos hasta remover la ira del Padre. Jesús aplacó la ira de Dios en la cruz, eso es la propiciación. Si no fuera porque ahora nos vestimos de la santidad de Jesús, nunca hubiéramos podido presentarnos delante de un Dios tres veces santo con nuestra suciedad, maldad y perversión.
¡Qué maravillosa noticia! ¡Cristo ha quitado la enemistad entre Dios y nosotras! ¡Él ha rasgado el velo en dos para acercarnos con confianza a Su trono!
RESPONDE: ¿Miro el pecado de la misma manera que Dios lo ve? ¿Veo a Dios como un abuelo consentidor o como un papá enojado? ¿Me acerco a Dios con confianza sabiendo que en Cristo solo recibiré gracia?
O R A : -Dale gracias a Dios por enviar a Cristo para aplacar la ira que pesaba sobre ti. -Pídele a Dios que te ayude a ver cómo el sacrificio de Cristo restauró tu relación con Él. -Lee Hebreos 4:16 y úsalo como una guía de ora: -Dale gracias a Dios por enviar a Cristo para aplacar la ira que pesaba sobre ti. -Pídele a Dios que te ayude a ver cómo el sacrificio de Cristo restauró tu relación con Él. -Lee Hebreos 4:16 y úsalo como una guía de oración.